Esta semana mi esposo me invitó a un evento en su trabajo y a mí estas situaciones me aterran porque implica exponerme. Cada que algo así sucede, desde algunos días antes la ansiedad me invade, los pensamientos me atormentan y muchas veces termino diciendo, mejor no voy, de última hora.
Pero esta vez decidí que sería diferente, porque aunque son pocos los kilos perdidos, ha sido mucho el amor propio ganado. El día llegó y en lugar de nerviosa, estaba emocionada, quería mostrarle a los demás mis “avances”; aunque ellos ni están enterados de lo que me sucede. Así que llegué al trabajo de mi esposo sintiéndome como en pasarela, de esas veces que suena una canción en tu cabeza mientras caminas.
Después de un rato de estar conociendo gente nueva, alguien se acercó a preguntarme si estaba enferma, porque yo no era “normal”, en ese momento fue como caerme de mi pasarela imaginaria.
Y es que no es la primera vez que me hacen esa clase de comentarios, ¿por qué estas tan gordita? eso no es normal, ¿por qué estás tan bajita? eso no es normal, ¿por qué si haces dieta no adelgazas? eso no es normal, ¿por qué piensas así? eso no es normal, ¿vas al gimnasio, entonces por qué sigues gorda? eso no es normal.
Platicando esto con mi psicóloga, ella me preguntaba, ¿para ti qué es ser una persona normal?, en realidad no estaba segura de la respuesta, por lo que decidí buscar en Google y para mi sorpresa, normal, es todo aquello que se encuentra en un estado natural, o sea que yo así, tal cual soy, soy normal.
Me di cuenta cómo es que llevo toda la vida corriendo lo que parece una interminable carrera, tratando de alcanzar esa tan aclamada “normalidad”, mientras siempre he estado justamente en la meta.
Tengo 24 años en Agosto cumplo 25 , soy soltera y vivo con mis sobrinas a las cuales llamo hermanas porque nos criamos juntas. Desde quw tengo uso de rason mis hermanos, tios, tias y mi mamá encabezando la lista me han criticado por mi peso, ya que casi todos en mi familia son delgados, antes me dolían sus comwntarios y burlas ; ahora ya no tanto , pues a vecds depende mucho mi estado de animo a la hora de receptar lo aue me dicen, como saludable , poquisimas veces como algo grasoso jajaja, pero cada día me siento mas y mas gorda y sufro de problemas dermicos , cada que me veo en un espejo me siento peor y aunque trato de que no me afecte a veces si sucede. Tu blog me llegó de cielo… Eres un crack , esta noche me acuesto un poco mejor. Millom buenas vibras para ti 💕
Leer que alguien llegue a esa resolución, invade mis ojitos de lágrimas.
Esperemos llegar todas a esa seguridad.
Yay!
Ya quisiéramos muchas personas ser tan valientes y normales como tú. Un abrazo Gina
Hay pero si tú eres las chaparritas más pechocha que yo conozco! Ya quisieran los “normales” tener la grandeza de tu corazón! (Y yo el tamaño de tus pompis jajajaja que la verdad las envidio!)