Hace poco decidí que era momento de hacerme un chequeo médico general, ya que tenia aproximadamente 2 años que no me tomaba el tiempo para hacerlo y creo que debe ser parte de esos nuevos cuidados que me estoy procurando.
Al llegar a la cita, lo primero que mencionó el doctor es que claramente tenía problemas de peso y que mi nivel de índice de masa corporal (IMC) confirmaban mi obesidad.
Durante esos minutos pasaron mil sentimientos, molestia con el doctor por ser tan drástico y crudo, tristeza por darme cuenta a que niveles estoy llevando a mi cuerpo y frustración porque pareciera que, aunque ya cambié mis hábitos, no es suficiente.
El doctor me recomendó hacerme una serie de análisis de sangre para poder detectar si padecía de diabetes, hipotiroidismo, colesterol alto, triglicéridos y demás. Y a pesar de mi miedo por las jeringas, esta vez decidí que era necesario hacer consciencia del estado de mi cuerpo.
Los resultados llegaron y había uno que me comía por saber, el que hace referencia a la tiroides, este resultado se me hacia crucial, ya que si salía que había algo mal con mi tiroides ¡tarán!, ya sabría quién es el villano de la película.
Así que enseguida lo revisé y para mi sorpresa, todo esta bien. En ese momento me desilusioné y me di cuenta que, en el fondo, una parte de mi anhelaba que me dijeran que esa era la razón de mis kilos, si resultaba que tenía hipotiroidismo, sería como tener un comprobante que dijera “estás libre de culpas”.
Al mismo tiempo, me di cuenta de lo absurda de mi idea, porque estaba prefiriendo tener una enfermedad incurable; una enfermedad que quien la padece realmente sufre y lucha por controlar; a aceptar la realidad y hacerle frente.
Porque siendo honesta buscar culpables, ya sean situaciones o personas, que me «impidan» tener un peso saludable es muy fácil, mucho más fácil que hacerme responsable de mí misma.
Intentando aprender algo productivo que sume a mi vida.
La verdad me alegra que no parezcas de hipotiroidismo, sabes se que cuesta mucho empezar ha bajar y darse cuenta de todo, pero se ve que tienes el impulso y el deseo de ir bajando de peso por cuidar tu cuerpo y eso hay que felicitarlo.
Yo tengo 24 años, me detectaron hipotiroidismo a los 16, desde mi desarrollo sufrí más problemas que muchas chicas de mi edad, me pasaban cosas que a ellas no, y yo me deprimí por que no sabía que pasaba pero más que todo no sabía que pasaba con mi cuerpo, era de que todos los días escuchaba a más de alguien que me hablaban sobre lo gorda que estaba, oh que iba subiendo de peso, y en mi mente solo pensaba que algo hacía mal, pero me mantenía sola todo el día y la verdad por bajar de peso pasaba el día sin comer, intentando hacer lo que otras chicas hacían, dejar de comer oh vomitar para no subir de peso, pero no funcionó.
Entonces mi mamá decidió llevarme al médico para ver por qué me estaba pasando todo eso y por qué estaba mal, me dijeron que podía ser la tiroides, me hicieron muchos exámenes y me dejaron cita para regresar por los resultados, en ese tiempo investigue sobre la tiroides y me di cuenta que sufría de varios síntomas, y me puse muy triste por que no quería tener hipotiroidismo.
Cuando regrese con el médico me dijo algo que no quería escuchar, tenia hipotiroidismo y tenia que empezar ya con el tratamiento que era de por vida, note como cambio la mirada de mi mamá al saber eso, la tristeza se notaba en sus ojos, yo por dentro quería gritar y llorar pero no podía hacer algo así y que mi mamá se pusiera peor de lo que estaba, esos primeros días me la pasaba llorando no quería saber nada de nadie, y después seguía con chequeos y exámenes cada mes casi una vez por semana tenia algún examen para ver si mejoraba oh había algún cambio, quizás de todo lo que más me dio tristeza fue cuando me dijeron que por los problemas que tenía si quería tener hijos en algún momento debía cuidarme más y planificar ya que era difícil que llegara a tener un bebé, así que ese era algo muy triste, conforme los años sigo medicandome y es difícil por qué el cuerpo se reciente por todo, uno puede padecer de muchas enfermedades y dificultades, pero trato de ser un poco más positiva que que no negare que aún lloro por eso, y por las ceiticas y las cosas que me dicen las personas con ver mi físico, sin saber mis luchas y lo que sufro por dentro, la verdad solo trato de vivir de disfrutar y de cuidar mi cuerpo.
Así que ahora chica hermosa hay que seguir y no rendirse, que vas por bien camino y que bien que te cuides y cuides tu cuerpo
Hola Steffany 🌷 no sabes lo agradecida que estoy porque hayas compartido tu historia, ya que a veces no somos conscientes de todas las consecuencias que tiene padecer de la tiroides, te mando un abrazo grande lleno de fuerza para que sigas cuidando de ti 💕
Yo peso casi las 250 libras y eso me pone muy triste